Después de casi nueve años de su participación en la serie juvenil “La Calle de los Sueños” de Venevisión, el galán Eduardo Orozco regresa al canal de La Colina para encarnar a “Juan Carlos ‘Juancho’ Gabaldón”, en la nueva producción dramática “Torrente”.
Es un atractivo cirujano estético, alegre, dinámico y entusiasta, quien posee un carisma y fama irresistibles entre las féminas que acuden a su consultorio. Le encantan las fiestas, las parrillas y los tragos con los amigos, todo lo contrario a su querida esposa “Maruja Briceño” (Giogia Arismendi), de personalidad más conservadora, ella siente que él no la valora como merece. “Juancho” es hermano de “Reinaldo” (Luciano D´Alessandro) y “Sebastián” (Damián Genovese).
¿Cómo te llega a las manos la oportunidad de hacer este personaje?
Me encontraba en pleno proceso de reestructuración profesional y relanzamiento, tenía ganas de irme a estudiar a otro país, pero más temprano que tarde mi representante me comentó el interés que tenía Venevisión en mi, estudiamos la oferta y decidí continuar mi crecimiento profesional en este Canal.
¿Cómo describirías a tu personaje?
Es una persona que no tiene patrones muy marcados, ni estrictos, tan sólo vive la vida con la mayor de las simpatías y sonrisas posibles. Y por supuesto, siempre se ve envuelto en situaciones divertidas principalmente con las mujeres. Es un gran profesional, muy serio con su trabajo, cree en el cultivo del amor familiar y gracias a su educación es un esposo fiel, hasta allí es una persona común. El problema arranca cuando le provoca armar un bochinche en su casa o donde sea, animado por la salsa más brava, acompañado por el divino olor de carne a la parrilla y por la infaltable presencia femenina; con quienes no tiene ningún limite en expresarles la inconmensurable atracción que siente por ellas. Sabrosón y puede pecar un poco en la ordinariez.
¿Qué aspecto te llama más la atención de este rol?
Su alegría, lo dinámico y creativo; el saber separar el bochinche del trabajo. Y por supuesto, su amor por la familia.
¿Encuentras semejanzas entre tu personalidad y la de “Juancho”?
En muchas cosas, sólo que soy muy tímido o quizá introvertido comparado con él. Pero tenemos mucha semejanza en el enfoque alegre y relajado de la vida, en la conciencia de saber que vivimos en un país de mujeres hermosas y que somos a la vez sinceros con nuestros compromisos emocionales.
“Juancho” es irresistible para las mujeres, ¿qué piensas de eso?
Es un hombre trabajador, inteligente, alegre, auténtico, divertido, sincero, caballeroso y pachangoso; a muchas mujeres les resulta atractivo un hombre así. Él no tiene medias tintas, va por la calle del medio.
Él se lleva mal con su esposa “Maruja”, son incompatibles, ¿“Juancho” no piensa hacer nada para arreglar su matrimonio?
“Maruja” (Giogia Arismendi) obviamente no se siente segura con “Juancho” por lo expresivo que es con las mujeres. Es cirujano plástico entonces siempre anda en medio de lipos y operaciones de glúteos y senos; y no debe ser una posición muy fácil para una mujer con las características de “Maruja”. Evidentemente se siente insegura de su marido, y claro que sí, “Juancho” hace lo posible por brindarle seguridad a su mujer: enfrentando con mucho profesionalismo su trabajo y otras acciones que conocerán en el desarrollo de la novela.
Ella lo llama mujeriego y bonchón, ¿es cierto?
Súper cierto en cuanto a la característica de bonchón y además es súper cierto que ella no lo es, allí está el primer round del choque entre ellos. Sin embargo, lo de mujeriego hasta ahora se que queda en palabras y no en hechos.
¿Él está enamorado de su esposa?
La ama con todo, es algo muy curioso en una pareja de características tan contradictorias; a lo mejor esa es la razón del por qué es un amor tan profundo; cada quien se enamoró de la esencia del otro y eso está por encima de las características que vemos en el día a día, de la persona que amamos.
“soy feliz porque me río haciendo mi trabajo”
Desde aproximadamente los siete años de edad, este talentoso galán de telenovelas ha estado ligado al medio artístico, a través de sus participaciones en alrededor de veinte comerciales para bancos, bebidas, galletas, restaurantes, productos lácteos, helados, champúes, y ropa; y de su trabajo en la obra de teatro “Alicia en el País de las Maravillas”, en el Ateneo de Caracas. Sin embargo, el debutante actor se alejó de la pantalla y de las tablas, “me desligué del medio hasta cumplir los diecisiete años”, apuntó el artista.
Un año más tarde, Orozco haría su gran debut en la pantalla chica con la serie juvenil “La Calle de los Sueños” de Venevisión, ante esta primera participación, el actor afirmó que después de haber actuado en esta producción, comenzó a tomar en serio la idea de emprender una carrera artística, es así como interviene en los dramáticos, “A Calzón Quitao”, “Trapos Íntimos”, “La Invasora”, “Mujer con Pantalones”, “Por Todo lo Alto” y “Te Tengo en Salsa”. Participó en el largometraje “La Hija de Juana Crespo” y en el cortometraje independiente “Y, ¿Ahora Qué?”. El actor también se ha destacado en la animación en el canal de televisión por cable E! Entertainment Televisión, como Host de los “E! Special, en Río de Janeiro-Brasil y en la Isla de Margarita”.
¿Qué te llamó la atención de la actuación? ¿Por qué te decidiste por esta carrera como profesión?
Toda la vida me ha gustado buscarle el por qué a las cosas, siempre me han atraído los números y por eso estudio Administración. Me veía en un futuro dándole la vuelta a los negocios, tratando de encontrar las necesidades actuales en una sociedad y levantar un negocio propio, por supuesto rentable, pero descubro la actuación y me doy cuenta que encuentro una nueva búsqueda. Esta vez no con los números sino con las características internas del ser humano y me atrae tanto que se convierte en una prioridad, tanto así, que hoy día soy mi propio negocio. Ahora tengo que justificar no la supervivencia de un local comercial sino la veracidad y consistencia de mis personajes y en ese proceso he descubierto que soy un hombre muy feliz, porque me río haciendo mi trabajo.
¿De no haber sido actor, a qué te dedicarías?
Sin lugar a dudas si no hubiera sido actor, y hubiera tenido la madurez suficiente para darme cuenta de mis cualidades, habría dedicado con mayor conciencia mi tiempo a descubrir la gran posibilidad de ser pelotero profesional, beisbolista. Donde hoy día pienso que habría tenido grandes posibilidades. Toda la vida he sido muy deportista y he representado a mis colegios, institutos y universidades en muchas disciplinas deportivas, especialmente en básquet, voleibol, fútbol y béisbol, pero con esta última disciplina me medí a nivel nacional y tuve éxito; a lo mejor por lo relativo y las tantas variantes de ese deporte, dediqué mi vida al estudio universitario y a ejercer, claro no había conocido la actuación en ese entonces.
¿Piensas continuar la carrera de Administración?
Actualmente y desde hace ya un par de años tengo paralizados mis estudios universitarios. La actuación se convirtió en mi prioridad, por lo menos por los momentos. Obviamente mis deseos de graduarme siguen intactos pero debo cuadrarlos y hacer un espacio de tiempo con la actuación. Porque como es de saber, ambas disciplinas necesitan tiempo y dedicación. La vida me presentó el deporte, la administración, la actuación, la gastronomía y en este momento, también quisiera dedicarle tiempo y estudio a la dirección, fotografía y a la edición.
¿Además de la telenovela tienes algunas propuestas de trabajo quizá en teatro o cine?
Este año me parece muy interesante, porque tengo planes de estudio que poseo desde hace ya un tiempo prorrogados. Creo que al fin voy a poder concretar la realización de una o dos obras de teatro, y una película con un concepto interesante; en fin, este es un año en el que me estoy ocupando de cerrar varias cosas que tengo pendientes desde hace tiempo, tanto en Venezuela como fuera de ella.
¿Cómo te encuentras sentimentalmente hablando?
Mi corazón está ocupado por una hermosa mujer, Claudia Moreno, desde hace un poco más de un año, y viviendo una etapa muy interesante, superando valientemente una separación que tenemos por su oportunidad de trabajo en el exterior. Nos vemos menos, pero aprovechamos al máximo el tiempo que pasamos juntos, nos apoyamos y comunicamos mucho.